La ascendencia de Banana Kush cuenta con dos tipos de genéticas sativa de gran calidad: una mezcla Skunk-Haze obtenida al cruzar la siempre fantástica Silver Haze con Skunk Kush, así como el famoso híbrido NYC Diesel de dominancia sativa y de gran sabor. Del mismo modo, cuenta con la presencia de variedades índica afganas de la mejor calidad conocidas como Kush en ambos lados del árbol genealógico. Como se ha mencionado, Skunk Kush constituye un elemento indispensable e importante del lado paterno, mientras que OG Kush, el orgullo del cannabis californiano, es la planta madre utilizada para obtener Banana Kush de White Label.
Las plantas cultivadas a partir de las semillas de cannabis feminizadas Banana Kush muestran los típicos patrones de crecimiento de las índicas. La influencia Sativa de esta variedad se ve principalmente en la estructura de sus flores y, más tarde, en el efecto de sus flores secas. El crecimiento vegetativo es vigoroso y fiable, y la mayoría de las plantas producen un tallo principal grueso y productivo, junto con ramas robustas con internodos cortos. Durante la fase de floración, se puede esperar que Banana Kush aumente la altura de la fase vegetativa de un 100 % a 150 %. Como regla general, a las plantas cultivadas a partir de semillas hay que inducirlas para que empiece la fase de floración cuando alcanzan un poco menos de la mitad del tamaño final deseado, mientras que a los clones hay que mantenerlos en la fase vegetativa hasta que alcanzan aproximadamente el 60 % de su tamaño final, para luego pasar a la floración.
En las primeras semanas de floración, Banana Kush ralentiza su crecimiento en dirección ascendente a medida que los primeros cálices se desarrollan en los muchos puntos donde aparecen los brotes. Antes de la mitad de su tiempo de floración de 7 a 9 semanas, esta variedad dedicará la mayor parte de su energía a producir multitud de cálices pequeños, sólidos y resinosos en cada nodo, que rápidamente se convierten en grupos compactos de cogollos. Los grupos de flores suelen adoptar una forma cónica o piramidal con una base extra ancha que se va estrechando hasta llegar a una punta achatada. A causa de la súper abundante formación de cogollos de Banana Kush, los cogollos de la punta final en la parte superior de su tallo principal y los de las ramas a menudo se unen con los grupos de flores que están debajo de ellos formando grandes colas, a pesar de la tendencia de los cálices a agruparse en los nodos, en lugar de «desarrollarse» entre ellos.
En la fase de floración, Banana Kush de White Label necesita muy pocos cuidados y a las plantas que crecen en una instalación de cultivo adecuada se las puede dejar a cargo de sus aparatos hasta el momento de la cosecha. La humedad debe mantenerse baja en la segunda mitad de la floración, debido al tamaño y la formación compacta de los cogollos de esta variedad. Aunque el olor que desprende durante el cultivo no es muy fuerte, los cultivadores deben tener en cuenta que es probable que aumente a medida que se acerque la cosecha. Como muchas variedades índica de gran producción, Banana Kush es una planta que necesita muchos nutrientes, especialmente para que sus fenotipos más productivos den su máximo rendimiento.
Después de la cosecha, normalmente los cogollos suelen secarse rápido conservando gran parte de su tamaño. Para cosechas más abundantes, se recomienda un deshumidificador o una buena circulación del aire en el área de secado, ya que los cogollos de Banana Kush pueden liberar una gran cantidad de agua en el aire en poco tiempo. La poda también es una tarea sencilla, ya que las plantas producen una cantidad mínima de hojas en la fase de floración e incluso los grandes grupos de flores desarrollan relativamente pocas hojas de un solo foliolo.
Los cogollos secos y curados de Banana Kush de White Label entusiasman a cualquier entendido del cannabis. Gruesos, afrutados y aromáticos, pegajosos por las glándulas de resina, pero fáciles de desmenuzar debido a los cálices en comparación pequeños que los componen. Al desmenuzar los cogollos se libera todo el complejo aroma de esta variedad: plátano dulce y maduro, azúcar moreno y un toque fuerte de lima-limón procedente de NYC Diesel, sobre una base de índica deliciosa y especiada que viene de su ascendencia afgana Kush.
Al igual que su patrón de crecimiento y floración, los efectos de Banana Kush de White Label son en su mayoría índica, pero su parte sativa es suficiente para potenciar su fuerte efecto a nivel cerebral y corporal y para hacerla destacar entre otras variedades de la familia Kush. El agradable efecto eufórico y relajante de Banana Kush se siente muy rápido, casi tan pronto como se exhala. La parte Haze de su perfil cannabinoide puede sentirse poco tiempo después, ya que potencia la subida o efecto psicoactivo haciéndola más propicia para la conversación, la risa y la creatividad.
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